miércoles, 23 de diciembre de 2009

De Ratones y hombres...

Es cierto, llevo días saturado de trabajo (“del que me da de comer” como comentaba el otro día Sergio compañero de fatigas del Máster) el cierre del año es lo que tiene… y entre lo tarde que vengo saliendo del trabajo día sí día también, la vorágine navideña que me rodea, trabajos varios de otras asignaturas, Saskia Sassen y algún problemilla personal que dejo para un posible futuro diario-blog, veía que se me echaba el tiempo encima y no conseguía completar la tarea de publicar en mi blog las entradas necesarias. Así que ya había decidido buscar a la desesperada cualquier tema sobre el que poder hacer un post medio decente y quitarme, al menos de momento otra cosa de la lista de tareas del ‘viejo año’.

Pero buscando, buscando hace unas horas me he encontrado con un artículo en El País, (mi fuente de inspiración confesada) que de repente me ha interesado realmente, en principio el título me ha llamado la atención y me ha animado a leerlo “La desglobalización ha empezado, no volveremos al viejo régimen” (también confieso que no, no conocía al autor Richard Sennett… seguramente a estas alturas de curso debería al menos sonarme ya que se trata de un eminente sociólogo, que además, para mi sorpresa es el marido de nuestra querida Saskia Sassen!), ahora no tengo menos que recomendároslo encarecidamente.

No me esperaba el torrente de ideas esbozadas en unas pocas líneas que me iba a encontrar (tercera confesión…probablemente si el artículo lo hubiera encontrado en un medio de menor ‘tirada’ me habría sentido tentado de copiarlo como ideas de mi cosecha), tan próximas a mis propias ideas pero no solo eso si no aun más importante, a mi propia vivencia personal y laboral.

Desgranando algunas de las ideas que se destilan en la pequeña reseña del periódico, hay varias que merece la pena destacar la principal es sin duda la que ilustra en su último libro “El Artesano”, es la idea del trabajador-artesano, aquel que se satisface con el trabajo bien hecho.

Y en esta línea lo que me han parecido más sorprendente, por lo novedoso de leer de un reputado sociólogo algo que pienso desde siempre, es las idea de trabajador cualificado-competente, poniendo en valor a las miríadas de trabajadores que el sistema en el que nos hemos imbuido considera como no-cualificados y que sin embargo de ellos también depende el buen rumbo de cualquier empresa o institución. No se trata de comparar su labor con la de los ingenieros, médicos o abogados, no, se trata simplemente de cambiar la lente con la que se mira y la manera de medir el trabajo que cada uno realiza en su puesto. Esta idea me ha cautivado, tal vez (cuarta confesión…) porque me he visto retratado personalmente dentro de esta definición en cada uno de los distintos puestos que he ocupado y ocupo en las compañías para las que he ido trabajando, de hecho creo que en cuanto me lea el libro se lo voy a enviar a la dirección de Capital Humano de mi empresa a ver si captan la idea.

Otras reflexiones esbozadas en el artículo me parecen clave como la escasa resistencia de la economía real para enfrentarse a la explosión financiera; o las opiniones de los técnicos de Wall Street sobre sus superiores. Y la que comparto como si fuera mía sobre el empeño de nuestros dirigentes (sin distinción de credo o siglas de militancia…) en hacernos creer que la única salida de la crisis que vivimos es devolver el capital invertido a los banqueros, ¿Hasta cuándo vamos a permanecer de brazos cruzados mientras hipotecan nuestro futuro?

Creo que en esta crisis en la que seguimos inmersos hemos desaprovechado (como sociedad, otra cosa es lo que haga cada uno y habrá quien lógicamente, consiga salir renovado de ella) una oportunidad que difícilmente se nos vuelva a presentar en muchos años de recomponer el sistema de valores global de la sociedad en la que vivimos, por el contrario hemos optado por parchear el sistema que tan buenos resultados a dado a unos pocos, para así tratar de salir airosos de la situación en la que ese mismo sistema nos ha metido hasta el cuello.

Quinta confesión: en este punto doy por finalizado el post porque me estoy yendo del tema… contra lo que pueda parecer, tranquilos!, no soy un militante anti-sistema infiltrado en el Máster, simplemente como ciudadano de a pié (creo que medianamente informado) hay cosas que solo pensarlas me enfadan mu-chí-si-mo…

HASTA PRONTO y FELIZ NAVIDAD A TODOS!

1 comentario:

  1. Josetxu, muchas gracias, he leído el artículo sobre el libro de Sennett y me interesa mucho leerlo. Y especial gracias por descubrir el vínculo entre Sennett y Sassen, las lecturas serán más ricas así :)

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